Os habréis preguntado muchas veces qué es un Dálmata LUA.
Pues bien, la palabra LUA corresponde a las siglas Low Uric Acid en inglés, por tanto, los Dálmatas LUA son ejemplares resultado de una «modificación genética» para conseguir la producción de niveles bajos de ácido úrico en su orina (o mejor dicho, normalizado como en el resto de razas de perros); teniendo por ello menor posibilidad de producir cristales de urato en sus riñones, y por consiguiente menos riesgo de que se formen cálculos renales por uratos que obstruyan las vías urinarias. Lo que comúnmente nosotros conocemos como «piedras en el riñón».
Alrededor del 1900, se descubrió lo que se llama el defecto genético fijo del Dálmata, defecto fijo que no padece ninguna otra raza, y que supone que TODOS los Dálmatas (excepto los que forman parte del proyecto LUA) tienen siempre los niveles de ácido úrico alto. Los Dálmatas son conocidos por su metabolismo uricotélico, es decir, en su orina excretan predominantemente ácido úrico como producto de deshecho del metabolismo nitrogenado (el resto de mamíferos -incluido el resto de razas caninas- son ureotélicos excretando predominantemente urea). Esto, desafortunadamente, puede conducir a la formación de cálculos renales como resultado de la acumulación de cristales de urato; especialmente en los ejemplares machos, en el que el conducto urinario es más estrecho.
Los cálculos se pueden formar en cualquier parte del tracto urinario del perro, desde el riñón a la uretra, aunque la localización más frecuente es la vejiga. Los cálculos pueden causar irritación y hematuria (sangre en la orina) en los casos leves, o puede bloquear parcial o incluso completamente el flujo de orina en casos graves, haciendo que la micción sea dolorosa y en algunos casos comprometiendo la calidad de vida del perro de forma permanente. Suele cursar con apatía, vómitos o anorexia. En los casos más extremos puede suponer una intervención quirúrgica, la extracción del pene en machos, o hasta ocasionar la muerte del animal a raíz de una disfunción o fallo renal. Hay varios tipos de cristales que pueden conducir a la formación de un cálculo, entre los que encontramos cristales de cistina, de oxalato de calcio, de estruvita y de urato de amonio. Los dos últimos son los más frecuentes en nuestra raza: los cristales de estruvita aparecen en orinas con pH alcalino, y los cristales de urato se encuentran en orinas con pH de neutro a ácido. Los cálculos formados por cristales de urato son los más complicados de tratar y de disolver y son los más habituales en el Dálmata.
OJO: un Dálmata LUA no está predispuesto a formar este tipo de cristales de urato, pero ser LUA no le impide crear cristales de estruvita, que provienen de pHs básicos y no ácidos. Es importante destacar que el Dálmata LUA, por tanto, tiene las mismas posibilidades (pocas o muchas o ninguna) que cualquier otra raza de perro de padecer problemas renales; no por ser Dálmata tendrá predisposición, como en los Dálmatas HUA comunes, pero se entiende que cualquier ser vivo puede tener un problema aislado, puntual e individual de salud.
Desde hace varias décadas, algunos criadores intentan cambiar y solucionar el problema del ácido úrico alto en el Dálmata, un problema que va ligado a la raza ya que se descubrió que el manto moteado y la producción elevada de ácido úrico se encuentran en el mismo cromosoma. Además, todos los Dálmatas registrados de pura raza tienen este gen que los predispone ya que, si observamos la descripción genética de un perro de cualquier otra raza esta es genéticamente dominante N/N (ácido úrico normalizado), en cambio en el Dálmata el resultado es hu/hu pues lleva el gen mutado SLC2A9 que produce los altos niveles de ácido úrico.
Varias pruebas realizadas durante décadas en Inglaterra y EE.UU. determinaron que el ácido úrico alto estaba siempre presente en el Dálmata, y que no había posibilidad de criar ejemplares con niveles bajos o normalizados (como tienen el resto de razas) con la población de Dálmatas existentes en aquel entonces. A partir de ese momento, en los años 70 surge un proyecto llamado «proyecto de retrocruzamiento» o «the backcross project», de donde surgen los Dálmatas LUA. El Dálmata LUA se describe genéticamente como N/hu (expresión genética combinada del Dálmata no afectado por estos niveles altos) portando una sola copia del gen en su ADN (por tanto heterocigótico); o bien N/N en Dálmatas LUA en los que su ADN ya contiene dos copias del gen, siendo LUA homocigóticos o puros. Este último solo se puede obtener de la combinación de cruzar dos Dálmatas portadores del gen LUA, ya sean N/hu o N/N.
Gaia, nuestra primera hembra LUA (N/hu) en copropiedad
Los inicios
Los Dálmatas LUA provienen de un retrocruzamiento fruto de un proyecto que se inició en 1973, realizando un cruce único entre un ejemplar sano y campeón de raza Pointer llamado CH. Sandown de Rapid Transit, y una hembra Dálmata llamada Lady Godiva.
El Dr. Robert Schaible médico y genetista de la universidad de Indiana llevó a cabo esta combinación para intentar eliminar el defecto genético del Dálmata que afecta al metabolismo del ácido úrico. Dálmatas registrados y seleccionados fueron utilizados en apareamientos subsiguientes con la progenie del cruce original de la hembra Dálmata con el macho Pointer. Los tres primeros apareamientos, denominados «retrocruzamientos» produjeron una descendencia que se dividió en media camada de Dálmatas LUA (ácido urico bajo) y media camada de Dálmatas HUA (High Uric Acid o ácido úrico alto). Cuando se llegó a la quinta generación, el American Kennel Club aceptó registrar un macho y una hembra LUAs. Esto sucedió en el 1980. HUA y LUA se distinguían en un principio por la diferencia en sus muestras, al encontrar hasta diez veces menos ácido úrico en creatinina in situ, además de que, inicialmente y en términos «físicos», la pigmentación y el manchado eran claramente menos nítidos y en menos cantidad. Hoy en día se realizan análisis de ADN para identificar el gen específico que se encuentra en el cromosoma 3, y la mancha del Dálmata LUA es casi tan parecida como la del Dálmata HUA, siendo apenas imposibles de diferenciar.
Actualmente este proyecto se encuentra en una fase generacional muy avanzada desde el cruce original, alrededor de la generación 18. La progenie tiene el 99,95% de ADN de Dálmatas registrados, por tanto estos hechos sugieren que los descendientes de LUA/HUA no se pueden distinguir genéticamente de los Dálmatas tradicionales. Los cachorros LUA presentan valores de ácido úrico diez veces menores que sus hermanos de camada HUA, y este fenotipo permanece en la edad adulta como lo demuestran diez de los descendientes LUA analizados hasta día de hoy, demostrando niveles de ácido úrico en vejiga hasta seis veces menores que los HUA, pruebas realizadas mediante ultrasonidos por la Dr. Susanne Hughs.
A pesar de que todos los Dálmatas registrados son recesivos homocigóticos por el defecto genético fijo, no todos los Dálmatas tienen la misma predisposición a la formación de urolatos, por lo que es importante tanto un plan de cría adecuado como una dieta estricta e ingesta de agua abundante. En la actualidad los Dálmatas LUA pueden caracterizarse por tener un tamaño de mancha algo menor o igual a los HUA (a pesar de que cada vez se logran manchas de mayor tamaño) y tener casi la misma nitidez que los HUA: esta diferencia empieza a hacerse imperceptible.
Los LUA evolucionan hasta la actualidad
Tras muchos años con la negativa del AKC- American Kennel Club (Club Dálmata Americano) para inscribir en sus libros a estos ejemplares, y tras un parón de cría en 1984, en 2006 se readmitió el registro de estos ejemplares en Estados Unidos. Pero por aquel entonces, en la década de los 80, criadores convencidos de la gran mejora que esta pequeña modificación suponía para la raza, siguieron haciendo entrecruzamientos con ejemplares LUA; no solo personas como el Dr. Schaible, también otras como Holly Nelsson (criadero Forrest Dalmatians) y su colega Joanne Nash (criadero Rambler). Nelsson murió en el año 1990 quedando sólo Schaible que pudo continuar con el proyecto sin ayuda de otros criadores. Posteriormente la hembra que utilizaba en los cruzamientos envejeció y murió sin quedar ninguna sustituta. A comienzos de 2005 todo lo que quedaba del proyecto que había comenzado con tantas promesas eran dos perros LUA de mediana edad, semen congelado de dos ejemplares de Holly Nelson y algunos perros de Joanne Nash. También unos pocos machos enteros que vivían en hogares como mascotas, pero de personas que no tenían interés en la cría.
En marzo de 2005, uno de los sementales de Schaible produjo dos cachorros con el gen de ácido úrico bajo de Robinwood, proporcionada por Sara Ledgerwood. El Dr. Schaible se quedó con uno de las cachorros hembra y se entregó el otro a Denise Powell. Con ese cachorro, la rama de la costa oeste perdida en un principio, fue de nuevo reintegrada al proyecto. Posteriormente se produjeron distintas camadas con bajos niveles de ácido úrico. El proyecto LUA fue creciendo en EE.UU. pero no había llegado aún a Europa. Fue entonces cuando en 2008, en Francia, Dominique Vincent importó la primera hembra LUA de Europa, «Stocklore Forrest Windsong», seguido de las inglesas Julie Evans y Elizabeth Sampson en 2010, quienes importaron respectivamente a Fiona «Ch. Fiacre’s First And Foremost» y la cachorra Sally «Stocklore Sally Forth», que viajaron en el mismo vuelo destino Reino Unido. Julie Evans luchó contra viento y marea para conseguir su registro en el Kennel Club inglés y que se le permitiera criar con ella y asistir a exposiciones oficiales. Un año más tarde, en 2009, Elizabeth Sampson importó al primer ejemplar macho, Merlin, «Stocklore Wizard of the Forrest».
Fiona fue el icono de la lucha por el Dálmata LUA y, a la vez, el foco de desprecio y exclusión hacia estos. Muchas fueron las críticas y debates ocasionados a raíz de su inclusión en el libro de orígenes inglés y de su participación en Crufts 2011, el evento canino más grande del mundo. Otros criadores se sumaron más tarde a esta acción e importaron ejemplares y/o semen congelado de Dálmatas LUA americanos, como Melissa Glasner del criadero Somora’s en Alemania, quien en 2013 importó semen congelado del reconocido Maks «Rim Rock Stocklore Mystic Maks» propiedad y cría de Barb Allison, cruzando con la hembra Melody «Melodya s Nevskih Ostrovov». Esa camada produjo varios cachorros LUA, y de ellos salió Brujo «Somora’s Great Xpectations», quien fue importado a España por Esther Manzano, y fue el padre de nuestra primera Dálmata LUA, Gaia.
Con Gaia empezó nuestra andadura en el proyecto LUA, en agosto de 2015, de la que obtuvimos su primera y única camada en julio de 2018.
Nuestra segunda hembra LUA fue Diva «Dalstorm Golden Goddess», criada por Elizabeth Sampson e importada desde Reino Unido a nuestro hogar.
Como es obvio, a día de hoy el Dálmata LUA sigue siendo más común en EE.UU., pero se ha expandido y proliferado exitosamente por todo el territorio europeo y ya tiene sus primeros ejemplares en lationamérica. En la actualidad los Dálmatas LUA compiten activamente en el panorama internacional y mundial obteniendo buenos resultados.
¿Cuál es el futuro de este proyecto?
El objetivo de los que actualmente participamos en el proyecto “LUA” es producir Dálmatas que sean buenos representantes de la raza y que lleven y sean capaces de transmitir el gen para la producción de niveles bajos de ácido úrico.
El objetivo último es que estos perros estén registrados en cada uno de las sociedades y asociaciones caninas, para que los criadores puedan libremente integrar el gen de la baja producción de ácido úrico en sus propias líneas de cría. De hecho hay criadores en Europa que solamente producen camadas con ejemplares LUA, como nosotros. En países como Francia, Alemania, Finlandia o Inglaterra se están realizando este mismo año camadas entre dos progenitores LUA, produciendo camadas del 75% al 100% portadoras de este gen y registrados en libros de orígenes de sus respectivos países.
En la actualidad y desde el año 2022, todas nuestras camadas combinan, al menos, un progenitor (padre o madre) portador del gen LUA, lo que significa que solo criamos camadas con este aporte y mejora genética; a pesar de que no todos los Dálmatas nacidos de estos cruces son portadores del gen (alrededor del 50%). En el medio plazo, nuestro objetivo es criar camadas en las que todos los cachorros nacidos sean portadores.
Desgraciadamente, estos Dálmatas LUA aún son poco comunes y un tanto difíciles de adquirir en algunos países, además de que algunos criadores rechazan, o se muestran reticentes, escépticos, o desconfiados ante esta mejora y evolución genética. Afortunadamente, el número de criadores LUA aumenta cada año en Europa, y pronto serán muchos más ejemplares los que podamos encontrar y de los que podamos disfrutar conforme pasen los años, para seguir trabajando en pro de la salud evolutiva de nuestra raza.
Sitios web de información:
LUA Dalmatians World
LUA Dalmatians
Proctor Dalmatians
LUA Dalmatiner
The UK first GM’s Dalmatian